El número de racimos que se debe dejar depende de la edad y de las condiciones de la vid. Como dato indicativo, una vid adulta y bien desarrollada puede llevar un racimo cada 25-30 en 1 de vara. Algunas va riedades producen racimos muy pequeños con bayas muy apiñadas; por ejemplo, «Brant» y «Cascade». En este último caso, se les puede dar una separación de 20 cm.
Debe evitarse el exceso de racimos, sobre todo en la vid joven, que puede ser estéril durante varios años si carga con una cantidad excesiva de racimos. En el caso de una vid de tres años, hay que dejar sólo dos o tres. Quizá cuatro o cinco al año siguiente, etc., contando, por supuesto, con que el desarrollo sea lo suficientemente vigoroso como para soste ner los frutos. El exceso de racimos y la eliminación de demasiadas hojas en el verano pueden disminuir también el color, el aroma y el contenido en azúcares.
Las variedades destinadas a la producción de vino no requieren el aclareo de los racimos, pero puede ser necesario en las variedades de uva de mesa, sobre todo cuando se trata de las que producen bayas grandes, como «Siegerrebe» o las clones de Chasselas. No es necesario en la variedad «Brant» y similares, pues sus bayas son naturalmente pequeñas.
0 comentarios:
Publicar un comentario